La “Dama del buen decir” fue íntima amiga de la familia Colosio Riojas, motivo por el que estuvo en el Hospital General de Tijuana mientras médicos intentaban salvarle la vida al candidato del PRI a la presidencia.
A más de 28 años de la muerte de Luis Donaldo Colosio, Talina Fernández lo recuerda a él y a su familia con cariño y tristeza, pues aseguró que el momento más difícil que atravesó como periodista fue el día en que el candidato a la presidencia por el Partido Revolución Institucional (PRI) recibió los tiros que le quitaron la vida.
Durante su carrera como periodista, Talina Fernández hizo amistad con varios políticos, entre ellos Luis Donaldo Colosio y su esposa, Diana Laura Riojas. En entrevista con Caras recordó el momento en que ella tuvo que dar la noticia de la muerte del político por parte de Televisa, evento que se convirtió en uno de los que más la marcó profesionalmente.
El 23 de marzo de 1994 Colosio se encontraba en un mitin en Tijuana, cuando Mario Aburto le disparó dos veces, provocándole le muerte.
Fue Talina quien se encontraba en el lugar como vendedora de televisión, se convirtió de un momento a otro la responsable de enviar información sobre lo que estaba ocurriendo a Televisa y, específicamente, a Jacobo Zabludovsky, quien insistentemente le pedía que le diera cada detalle de lo que estaba ocurriendo en Tijuana.
La comunicadora se encontraba en el mitin porque su amiga, Diana Laura, la había invitado a que se sumara, no para ser reportera. De hecho, ella había intentado acercarse a Colosio ese día, pero le fue imposible debido a la seguridad que rodeaba al político.
Fernández entonces se sumó a los demás reporteros que se encontraban ahí, para poder salir del lugar junto a ellos sin problemas, pero todo se convirtió en un caos en el momento que se dio a conocer que le habían dado dos balazos a Colosio.
Cuando la noticia comenzó a circular, Talina comenzó a recibir llamadas de Zabludovsky, las cuales en varias ocasiones decidió colgar por temor a no saber qué decir o hacer, pues estaba recibiendo información de primera mano al estar cerca de la familia de Luis Donaldo, pero no quería hablar de más.
“Estaba el licenciado Jacobo Zabludovsky pidiéndome información. Entonces yo tenía que medir cuál información le podía dar y cuál no, por respeto a la familia. Recuerdo haber colgado un par de veces las llamadas por no saber qué hacer”, confesó Fernández en la entrevista.
La dama del buen decir acompañó a Diana Laura desde el inicio del caos y pudo reunirse con ella antes de entrar al Hospital General de Tijuana, al que pudo ingresar posteriormente gracias precisamente a la amistad que mantenía con la familia de Colosio.
Mientras estaba en el nosocomio recibió la mayor cantidad de llamadas por parte de Zabludovsky, quien le pedía que se metiera a los quirófanos para saber qué estaba sucediendo con el candidato a la presidencia, pero ella se negó, con miedo a perder su trabajo, pero también a afectar a su amiga.
Una vez que le informaron a Riojas que su esposo había muerto, Talina intentó consolarla y le dio asilo en su casa, mientras esperaban que el cuerpo de Luis Donaldo fuera liberado del hospital y les avisaran cuando lo llevaran al aeropuerto para trasladarlo a la Ciudad de México.
Talina confesó que lamentó lo que sucedió aquel día porque no sólo perdió a su amigo, Luis Donaldo, sino que también a Diana Laura, ya que ese también fue el último día que la vio.
“Eso sucedió a las tres de la mañana, en una noche fría en Playas de Tijuana. Aquella fue la última vez que vi a mi amiga, Diana Laura”
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